Todos podemos mejorar la manera en la que tenemos de relacionarnos.
Nos enseñan a caminar, nos enseñan a hablar, a cumplir normas, nos enseñan lo bueno y lo malo
¿pero quién nos enseña a relacionarnos?
Hemos dedicado muy poco tiempo en nuestra vida a conocernos y crecer como personas.
Hay ocasiones que nos encontramos perdidos y repetimos una y otra vez los mismos errores, con los mismos resultados, la pareja cambia, los amigos cambian, pero el resultado es el mismo.
¿Tus relaciones son una fuente de sufrimiento?
¿Te suena? ¿Es tu caso?